1968

La tradición turronera de los Puyet se remonta a más de 200 años cuando el bisabuelo de Felipe se dedicaba a vender diversas variedades de turrones por todo el Valle del Ésera a lomos de caballería o a pie.

Los primeros datos contrastados de la actividad turronera de la familia Puyet se remontan al siglo XIX, cuando Felipe Puyet Castillón iba de feria en feria vendiendo el turrón que él mismo fabricaba.

Felipe Puyet Fantón le sucedió en la fabricación y sería conocido como “el turronero de Graus”. Los tres hijos de Felipe Puyet  Fantón extendieron la tradición turronera de la familia por Lérida y Francia.

Felipe Puyet Grau, que permaneció en la Villa de Graus, con la ayuda de toda la familia y en especial de su mujer Irene Sesé Espot, aumentó la tradición turronera, compaginando esa venta con la de gorrinos, cuerdas, pienso. Felipe extendió el mercado a la comarca de la Ribagorza (Valles del Ésera e Isábena ), así como al Sobrarbe, el Somontano y el Vall d’Aran.

Hoy los hermanos Felipe y Carlos, tataranietos de aquel primer Felipe turronero, han diversificado los campos en los que trabajaban, continuando los pasos de la familia y de la labor pastelera que sus padres Felipe Puyet Sesé y Carmen Martínez Blanquez.